Por éso las juzgo tan celosamente, por éso pienso -quizás demasiado- antes de abrir la boca, por éso no sé qué decirte, por éso reviso las comas y los punto y comas, por éso borro lo que escribo y vuelvo a redactar, por éso me enrosco, por éso me quedo muda, por éso dejo que hables aunque no te escuche, por éso no sé si mirarte a los ojos o a los labios, por éso el bolo psicológico, por éso voy a besarte cuando te vea. Silencio.
Punto y aparte.
Por eso pasamos a actuar y no sólo nos quedamos pensando.
ResponderBorrarSaludos!!
Hermoso esto.
ResponderBorrarO el temor a que ya salgan sin gracia.
ResponderBorrarSi, mil veces si. No se cual será tu caso ante el hecho de ser conscientes de que pensamos todo lo que pensamos y a todo eso, lo repensamos. Yo lo odio, y a la vez lo adoró, soy como un adicto a mis indecisiones y planes fallidos.
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