Yo me había adelantado a ese futuro
en un pasado ahora presente, pasando.
Mi sinopsis versaba sobre un drama,
hablaba de una parálisis del habla,
de no poder fijarte la mirada.
Saberte durmiendo con otra, compartiendo canciones y almohada
con otros oídos y otra boca, era el negativo que iba a querer velar.
Y llegó ese momento, ese instante en mi línea del tiempo,
la prueba de fuego.
Y estabas vos y estaba yo y estaba ella,
los tres hablando y riendo en la misma mesa.
Mi tiempo real no hablaba de un drama..
Era una vuelta de página, un antes y un después
otra canción, otro pentagrama.
Un ahora donde no éramos los mismos..
no había nosotros ni vos conmigo.
No había números pares, ni siquiera dos mitades.
Y me gustan los números impares,
me gusta saber que el cariño muta y no se desvanece,
lo marean las vueltas de la vida y le cambian el rumbo.
