24.10.11

Documento sin título.-

Quiero. 
Quiero sacar fotos y revelar mil negativos. Poner al lente de anteojo y salir a mirar el mundo para atrapar en papel ESE segundo tan justo.
Quiero dibujar formas que tienen sentido sólo en mi cabeza y perspectivas imposibles que no sé representar. Siento en colores y te veo sin mirarte. En mi cabeza, dónde todo es un caos, un desencuentro de emociones.
Quiero caminar sin semáforos ni autos que me obliguen a mirar a los costados. No quiero direcciones, ni bocinas ni carteles que me obliguen a prestar atención a lo que no me importa.
Te quiero? No. Y a vos.. te extraño? Tampoco. Y qué hay de vos.. te necesito? Otra vez no.
"Necesito alguien que me parche un poco y que limpie mi cabeza" "Help me get my feet back on the ground" "Please, please, please let me, let me get what i whant this time" "I can't feel, cuz i'm numb.. what's the wrong in all this?" "Are you missing the love of your kin?" "I want to, I want to be someone else or I'll explode"
Hablo en canciones pero me pierdo en el ritmo, mezclo letras, me mareo y me encuentro con la boca seca.
Quiero estar despierta para no perderme los detalles. Quiero leer más libros de los que puedo comprar en más idiomas de los que puedo interpretar.
Siento que los sentidos no me alcanzan y que no tengo poros suficientes para drenar todo lo que quiero saber.
Empiezo a sentir las grietas de mi propio acabado. Estoy a tiempo de vivir? Es normal que tan joven, tenga miedo a envejecer? No tengo huellas, estoy en blanco.

11.10.11

De pantalones y demás.-

Nos conocimos por estar desubicados en el lugar equivocado (o tal vez no?)
Nos enamoramos sin preguntas y de golpe. Me hizo enloquecer con besos que no conocía y fuimos una sucesión infinita de canciones hasta que dejó de quererme y ya no lo pude besar.
Lo amé hasta la fiebre y hasta el llanto, me quebró la sonrisa y también los labios. Nada de rencor.
Yo seguí caminando, explorando otros besos y otros brazos. Ahora estamos en pentagramas diferentes, pero seguimos cantando, le tengo aprecio sincero y cada tanto nos cruzamos. Sobre todo en los cumpleaños.


Un capricho en Buenos Aires de un lapso momentáneo. Dejó de interesarme en el instante que lo besé.
Un tipo plano, le faltaban mil aristas y una buena ortografía que no le llegó con los años.
Yo me volví y el vino en un tren a buscarme sin boleto de vuelta. Yo enloquecí, me asusté.
El tironeó, la cuerda se cortó y le regale un pasaje verbal de regreso obligado.
Lo borré de mi vida y el tuvo que hacer lo mismo, le perdí el rastro.. no lo extraño ni me interesa. Un tarado, me acuerdo y me espanto.


Un cruce de idiomas entre besos una noche de incoherencias de lugar y gente. Una aventura con fecha de vencimiento, él se volvía y yo me quedaba acá. A disfrutar.
Teníamos formas y realidades de vida antagónicas. Él pensaba en tomar y en todo tipo de drogas, yo en donde dejé mis invisibles y en encontrarme. Me seguía el ritmo en el humor y su acento me hacía delirar. Se fue, no lo extraño ni extrañé. Volvió, me buscó y lo encontré. Un spanglish de besos otra vez hasta que se fue por segunda vez.
Cada tanto hablamos. Una aventura, anécdotas de ayer.



Conocidos en común nos reunieron más de una vez. Un dulce de leche pero respetaba demasiado y te dejaba un mal gusto en los labios. Una historia poco concreta, muchos ademanes y poca certeza. Me aburrió y creo que yo también, ya casi no nos cruzamos pero terminó (empezó?) bien. Podemos bailar entre risas y hablar también. Es poco interesante, no creo querer besarlo nunca más. Buena persona, cuidadoso por demás, no se pudo aprovechar.


Un mismo viaje en colectivo nos encontró hablando de Spinetta y pavadas. Lo ví un par de veces más y nos desencontramos sin ninguna relevancia. Con los años lo crucé una noche no tan atrás, no lo reconocí de inmediato pero terminamos a los besos entre abrazos. De mano de la casualidad, el ron y algo más compartimos almohada algunas veces más. Abrazaba muy fuerte y me invitaba a quererlo abrazar por igual. Pero hablaba en palabras difíciles que no entiendo ni me interesó interpretar. Estaba enredado, demasiadas vueltas, me marié y no quise jugar más. Quizá tal vez lo vuelva a cruzar. 


Caí a su casa por casualidad, amigo de una amiga, y empezamos a charlar. Al día siguiente me buscó y yo no quise saber nada más, pero le surgió un trabajo: el Sur, iba a tener que viajar.
Probé a la suerte, total no lo veía nunca más. Dos semanas o menos, yo no me enganché. Él me quiso demasiado no sé porqué. Soltó un "te amo" urgente y quizás indiscreto qué me espantó de inmediato. Causa y consecuente. 
Se fue pero se quiso volver alegando un "te extraño". Yo di pasos agigantados al costado, no supe tratarlo. Le perdí el respeto, nos distanciamos de a poco. Creo que lo lastimé, fue sin querer.

6.10.11

Besos sin saliva.-

Y en un arrebato sin origen ni destino, 
me urge la necesidad de besarte o de que quizá me quieras besar.
Besos de malta, de menta, de almohadas, de mañana.
Una necesidad sin rumbo que se pierde entre ideas más urgentes 
para volverla a encontrar mañana o tal vez jamás.
Besos que no segregan saliva, besos secos de labios partidos,
besos que es mejor perder que encontrar.
Hay sequía de besos, y no porque falten sino porque no sacian la sed.

"Give me a beer and I'll kiss you so foolishly.." (Russian Red - Loving strangers)